jueves, 30 de diciembre de 2010

Feliz 2011

¡Feliz año nuevo!
Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack!
¡Felicidades!Feliz día. Feliz cumpleaños. Feliz aniversario. Feliz viaje.
¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack!
Todos buscamos lo mismo: ser felices.
¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack!
Sonrisa constante y eterna, Cabezas despejadas, claras y frescas.
¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack!
Sobra piel. Falta carne. Rellenar. Comer. Fagocitarse. Rumiarse.
¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack!
Falta piel. Sobra carne. Rebajar. No comer. Abandonarse. Transpirarse.
¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! Estrías. Grietas. Surcos. Canales. Pliegues.
¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack! ¡Clack!
Nos partimos como piedras.
A jugar. A despertar. A salir corriendo. Con sentido, con sabor, con razón. A fortalecerse en la debilidad. A doblar en la esquina menos pensada. A doblarse tratando de evitar los ángulos. Crean aristasssssssssssssssssssssssssssssssssss
Zanahoria corriendo conejos. Blancos lanzados a dardos lejanos. Sogas buscando cuellos Desnudos.
Insulsa flecha de un solo sentido .
No se puede corregir.
El borrador es el original
La tinta con la que te escibirázzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz

Gracias.
Nos vemos en 2011
Felicidades a todos

martes, 28 de diciembre de 2010

Eco

Eco
Solo eco
Eco desprovisto de su matriz sonora
Eco
Solo repeticiones de algo que ni si quiera recordamos
Eco
Impensando
Impertinente
Impúdico
Impresiso
Necesito de la madrugada para acomodar mejor mi oído hacia adentro
Me alisto cuando las sombras huyen, y solo hayo eco
Eco
Un mísero pensamiento que rebota solo en las paredes del cráneo,
esperándo eternamente a compañeros que no llegarán
Eco
Como Humberto pero sin ideas
Eco
Un razonamiento en diferido
Una repetidora televisiva
Programación de verano
Eco
Nada parece ser como era
Nada es como era
Nada será como era
Nada es nada
Y la nada no acepta repeticiones
Y aca hay eco
Eco
Si hay eco es porque hubo materia
Materia sonora
Materia de ideas
Antimateria
Reducir el delay,
bajar la reverb a cero.
Volver al patrón inicial
Cuerda al aire que busca un par para alinearse en 440
Tensión armónica primitiva,
reducir efectos,
Moverse ya de este desfiladero infernal.
Buscar el llano, el lugar de las voces limpias
Que el eco no sea lógico
Ecoilógico
Romper la coherencia
derribar montañas,
quemar bosques,
secar los ríos hasta que se abra el campo
y no suene más que una voz clara y pura.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Por las dudas

Por las dudas, escribo.
Porque sí. Porque es la puerta de salida. El portón.
Mi manera de ser. La esencia de mí. La tinta (voy a insistir en esto hasta que sea necesario)
Confío en las palabras escritas infinitamente más que en las orales.
Escribo desde siempre, hasta siempre y siempre y únicamente cuando tengo ganas.
Prefiero escribir.
Para romper el silencio. El silencio que producen las cosas que no se dicen; ese espacio vacío de palabras, repleto de nada.
Como pueda, mientras pueda, hasta que pueda voy a seguir escribiendo. Con el formato que necesite y ordene mi instinto. Que, como de costumbre me guía. Se debate día a día con es fiel representante de Dios entre nosotros (o del demonio, lo mismo es): el destino. Pero algo es claro: creo en él. Creo en el instinto.El siempre gana, se impone. Cazamos presas cuándo y cómo podemos. Y, desde ya, nos dejamos cazar de igual manera... ¿Otra vez la supremacía del más fuerte? No. Definitivamente no. Es un equilibrio. Se come y se es comido al mismo tiempo.
Autofagocitosis
Y sigo escribiendo; corre la tinta que es memoria. Ese borrón de cuaderno de escuela primaria... La memoria, despiadada acumulación de datos, muchas veces sin sentido, y otras con un sentido superlativo. Subdimensión o sobredimensión no tan aleatoria, según.
Solo un árbol con termitas.
Ausencia de mi. Por mi. Hacia mi. Y yo, buscándome por tantos lados equivocados, y estaba acá, como de costumbre.
La imposibilidad de verse, la búsqueda constante y estéril de la objetividad. Dirijo mi mirada hacia mi, y ya no estoy, me corrí, cambié de forma.
Solo queda mi ausencia.
El presente se escurre, ya no está. Esto que escribo pasa a ser pasado mientras va siendo escrito.
En definitiva, queda lo que queda grabado en la memoria, una cajita de música repleta de ausencias. Ausencias que huelen rico, saben bien, arrancan lágrimas, sonrisas; pero no son más que eso: ausencias. Añoranzas de cosas que pasaron, que ya no están. Solo nos quedan las sensaciones.
Las ausencias.
Las
Y escribo. Por todas esas cosas que me oprimen desde adentro.
Compresa
Represa
Dique
Pasador y...

lunes, 29 de noviembre de 2010

Descreo

Volver a la descreencia. Sín reproches, con los ojos cargados, la sangre espesa.

Tóxica medición del tiempo. Errónea.

Recuerdo mucho. Todo. Cada cosa. Cada detalle.
Extraño mi desmemoria.
Hay veces que siento que es la única salida posible: un "reset" emocional.

Pero no.

Ovillo sin fin. Sin puntas ni medios. Solo esta materia tangible y espesa que se acumula en mis recuerdos como el sarro en las canillas.
Me desafía al vacío, me tienta.

No es claudicación.
No.
Es solamente la búsqueda de la perspectiva. la vista desde este peñasco es más clara.
Invade.
Aterra.
Apócrifa amenaza.
Instinto animal mezquino

Criogenizar la emoción: así de frío y claro es el asunto.

Descreo

Descreo

Descreo

jueves, 25 de noviembre de 2010

Mordedura

Morder la banquina

Morder el polvo

Morder el cebo de tus labios

El jugo de las cosas, la pieza que falta siempre

Contener la presión.

Contenerme. Amordazarme. Maniatarme.

Rozar el filo de la tarde con la última gota de rocío,

mirando al silencio que se forma en el aire.

Las escobas se gastaron,

se murieron satisfechas, con un rictus soberbio de victoria

Las esperanzas aturdidas, fueron barridas por años.

No hay más, no quedan.

Se disparó el arma sín intensión.

(Solo sirvió para reparar en ella.)

Habrá que asesinar al mal antes de que nazca.

Quemarlo, reprimirlo, abortarlo.

Habrá que estar firme, frío y tranquilo.

No temblar. No vacilar. No dudar

Y yo lo único que hago es temblar como un nene asustadotodo el día.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Impulso contrario

¿Por qué acercarse al fósforo?
¿Por qué poner los pies en el balde con cemento?
¿Por qué ajustarse el nudo?
Anudarse. Enredar los nervios. Contracturarlos.
La materia gris que se vuelve roja.
Desde la boca del estómago, sube un fueguito abdominal.
Es la tensión misma del nervio central.
Estado de alerta constante.
Insomnio.
Las peripecias de un equilibrista sobre navajas.
Mirar al miedo de frente. A sus ojos huecos.
Que el miedo te mire de frente. A tus ojos huecos.
Cansados ya de la pregunta.
Inconsistente
Inconstante
Inconsiente
Se siente
Mucho
Consistente
Constante
Consiente
Maldito impulso contrario.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Descreencia

¿Qué es todo esto, más que la confirmación absoluta de que soy alguien profundamente creyente?
Si no fuese así, no haría las cosas que hago.
Encomendaría mi alma a Dios y ya

martes, 7 de septiembre de 2010

De como empecé a perder mi memoria

No recuerdo exactamente el momento en que perdí la memoria. Fue un descuido de mi parte. No recuerdo exactamente lo que iba a decir...

Me gustan los ravioles... ¡No!, Los fideos, sí, los fideos con tuco... ¡no! Con pesto. Sí, eso; con pesto. Fideos con pesto.

No recuerdo exactamente el momento en que perdí la memoria... no, me la quité solito, me la extirpé, me la saqué de cuajo. Entonces me perdí, y me busqué. Por todos lados me busqué. Pero claro, como antes de perderme yo, había perdido a mi memoria, no recordaba los lugares por los que me había buscado, y buscarme se volvió una tarea insufrible. Fue desesperante; llegué a pensar que la vida era solo eso: buscarme y buscarme y recordarme y olvidarme en el mismo instante y volver a buscarme y así...

Cíclico destino desmemoriado de buscarse siempre por los mismos rincones.

No recuerdo exactamente el momento en que perdí la memoria. Una hoja en blanco. Vacío. Format dos puntos cabeza., Memoria out. Fue un descuido de mi parte. No recuerdo exactamente lo que iba a decir... ¿Dije esto ya? ¿Dije esto ya? ¿Dije esto ya? ¿Dije esto ya? ¿Dije esto ya? ¿Dije esto ya? ¿Dije esto ya?

Voy a reventarme los malditos puntos negros. Me dedicaré pacientemente a cada uno de ellos. Voy a sacarles el pus hasta agotarlos, y si sangran, voy a seguir escarbando el agujero hasta que no haya más nada. Nada. Absolutamente nada. Nada. Mucha nada. Tanto como mucho de nada. ¡Pobre de mi!

Tuve una deja vú; ¡Deja, Vú! Vú, vú, vú, vú, busqué por todas partes a mi memoria... la extrañaba pero no me acordaba por qué... ¡Ahí está la madre del borrego! ¡La madre que lo parió! ¡La puta madre que los re parió!... ¡Ahhhhh! Necesitaba eso: un desahogo. Y salí del ahogo... y me acordé; ¡sí! Me acordé y casi en el mismo momento olvidé de nuevo... entones, decidí no intentarlo más. Tuve un instante de claridad y enseguida lo pedí también a él; ¡pero tuve otro!... y también lo perdí... ¡Y otro!... y lo perdí... y así... Al borde de la locura tomé pastillas para la memoria y nada. Probé caramelos, chicles, dulces, salados, raíces, flores, cremas, ungüentos, masajes, jarabes, pomadas, geles, espumas y nada, nada, nada, nada, nada, nada, nada, nada, nada, nada.

No recuerdo exactamente el momento en que perdí la memoria. No lo recuerdo. No me hace cuerda. Me gustan los ravioles con tuco; no con pesto; no fideos, ravioles con fideos!, no, con pesto; ¡eso! ¡Fideos con pesto!

Desmemoria – Amemoria – Inmemoria – Rememoria – Transmemoria – Prememoria.

Ayer, ví a una mariposa posada en las vías del tren... ¿Qué la llevó a gastar valiosísimos instantes de su tiempo en arriesgarse a un terrible embiste? ¿Por qué agita imperturbable su belleza? . No recuerdo exactamente el momento en que perdí la memoria. No recuerdo más que unas alas de mariposa. ¿Ayer?... ¿Ayer? Ayer era larva, gusano, oruga, crisálida de hoy. Arrastrarse sobre una alfombra alimenticia. Eso cómodo. Volar para sobrevivir es lo difícil. Ser la mariposa. Exponerse a que el vidrio te sorprenda de frente en cualquier momento.

No recuerdo lo que cabo de decir. No recuerdo lo que cabo de decir. No recuerdo lo que cabo de decir. No acabo de decir el recuerdo que. Acabo de decir que no lo recuerdo. Decir recuerdo lo que acabo de. Recuerdo que lo acabo de no decir.

Sí,... sí recuerdo. No diría todo esto si no recordase. Fragancias recuerdo, humedades recuerdo, texturas recuerdo, sonidos recuerdo, viejos textos recuerdo. Sensaciones. Recuerdo que una vez amé y una vez morí. Y volví a amar y volví a morir y volví a amar y volví a morir... Morí tantas veces que ya ni las recuerdo. Solo atesoro las que me han sido significantes. Ardí en una hoguera inquisidora. Me dejé morir de hambre. Caminé por la tabla pirata. Disparé a mi corazón algunas veces y varias a mi cabeza. Me envenenaron por amor. Salté al vacío, claro. Abrí mi pecho en innumerables harakiris. Me arrojaron moribundo al río desde un avión. Tiraron cuerdas de mis miembros hasta descuartizarme. Me acuchillaron en el senado. Morí despacio, de viejo; dejándome ir tranquilo. Acelerado, acelerando. De sobredosis, ahogado en vómito. Fui sacrificado a los dioses. Arrojaron mi cuerpo al Ganges y colgaron mi cabeza en una plaza. Fui pasajero del Challenger. Talibán suicida. Estuve en Aschwitz, Hiroshima, Nagasaky, Chernobil, Kabul, Bagdad, en el Manuel Belgrano, en Atocha, en Pompeya y en Tenochtitlán. Sufrí todas las dolencias. Me coagulé, derramé, ramifiqué y necrosé.

Y volví a nacer tantas veces... Recuerdo exactamente el momento, tirada en el piso latiendo sobre un charco de tinta, mi memoria. Recuerdo cada uno de los ínfimos detalles... Un reptil emocional bajo su propio sol. Viejas carcazas muertas. Nada. Envases vacíos. Almas huecas. Memorias descamadas. Mudas enmudecidas. Cajas de recuerdos tiradas por el piso del cerebro en un absoluto desorden.

Deslumbrante y siniestra revelación del rodaje de la película de mi vida.
Ser mi propia hoja en blanco.
Reciclarme las veces que sea necesario.
Y ser también la tinta que escribe sobre mi cuerpo hasta agotarse.
Esa es mi memoria:
la tinta con la que me escribiré
mañana.


2007

lunes, 6 de septiembre de 2010

No es lo mismo

¡No es lo mismo!
¡No es lo mismo! Gritaba un xenófobo personaje que conocí en mi adolescencia parodiando a un paraguayo.
¿no es lo mismo?
¿no es siempre la misma canción que suena y suena en la cabeza? Y ciertas veces la encontramos, y la volvemos a perder y así...

La confirmación: continúa la desmemoria.

Ecuasión simple: Recordar mucho es lo mismo que no recordar nada

Paradoja clara: Emoción térmica no siempre concordante con la real.
Si hay vientos internos, se siente más; porque se siente a flor de piel.
¿A flor?
¿De piel?
Volver al líquido incicial. Internarse en la mismísima entraña. Desgarradora. Aterradora aveces.
Y mística.
Fundamentalmente mística.
Creería para volver a descreer una vez más.
Pero no puedo
Ya no
Yo no
No señó

jueves, 2 de septiembre de 2010

Otra vez sopa

Reconcentrado en un plato de sopa de verduras y fideos "ave maría", reflexiono sobre la extraña relación que existe entre el sabor de las cosas y la angustia. Hundido en mis cavilaciones tanto como en este brebaje humeante, no me perturba nada. Nada me quita de allí. Los pensamientos flotando en esta emulsión de sabores, olores y cromas (decía un electricista exquisito en el uso de la verba)
Por otra parte (y es una obviedad) siempre preferí las municiones a los ave maría. Por eso, el cura que me confesó por última vez, recibió un persdigonazo en la gamba cuando me exigió que rece tres ave maría por mis pensamientos siempre vagos, siempre pecaminosos, siempre pensamientos, siempre... ¡Ud. no tiene un cabello de ángel! exclamo el prelado, y le tiré con unas letras que escribía por entonces, y claro, me excomulgó de ese lugar. Y me fuí silbando bajito de ahí, calculo que algo blasfemo.
Después de eso, decidí dejarme crecer el mostachol como el nono, para disimular y que no me encuentre ese señor, reprimido y transgresor. Y salí entonces del nido de mis viejos pensando que era la sagna; y no era más que vida. Me arranqué el moño de un tirón pensando que era un campeón, y era solo vida.

domingo, 15 de agosto de 2010

La espera

Esto es por su obsesión con el desguace de las emociones; con la disección del cadáver. El análisis térmico lo tiene por encima de lo normal, Sr. Lo suyo es claro;ud. tiene cálculos cerebrales. Sí, escuchó bien: tiene piedras en la cabeza. Y no van a salir si no es con dolor, lamento decirle.

CONCHA DE LA LORA, pensé, ¿será siempre condición? Al final, tiene razón Gregorio:
"Las personas felices nunca viven historias entretenidas"
CONCHA DE LA LORA, pensé pensé. No es la vejiga ni el riñón. Es la cabeza la que pesa y no quiere soltar riendas.
CONCHA DE LA LORA, pensé pensé pensé. Se me va a inflamar, se mi hinchará hasta que explote. Y siempre elije condiciones. Elije el dónde, el cómo y el cuándo.¡Oh mi Dios!
No, no creo. Sería un buen momento para colgarme de un Dios, pero no: debo ser
estrictamente sincero. No creo.
CONCHA DE LA LORA, pensé pensé pensé pensé. ¡Estoy condenado a este juego macabro al que me he sometido todo este tiempo! ¡No, no, no!¡No estándo aquí sentado llegaré a sacar esos cálculos para afuera!
Mejor escribo cualquier cosa para que no sea tan larga la espera

lunes, 21 de junio de 2010

Canción de amor


Puedo sentir el estado de tu alma en la turgencia de tus labios contra los mios.
Puedo ver las cicatrices de mil batallas libradas tras tu mirada
Puedo percibir la ira de tus dioses en las sutiles variaciones de tu voz
Puedo rememorar cada brisa compartida, cada sol, cada una de las noches
Si me esforzace tan solo un poco, identificaría como único cada bocado que probé a tu lado. Cada pucho mentolado...
¡Y Los licuados! de durazno, naranja o banana... y eso no es nada. Nada de nada...
Recordaría cada grillo en la noche; cada rana oída. Cada día. Cada hora.
Hundido en la memoria, recordaría cada histori.
Cada gloria, y cada rechazo.
Cada fracaso, y los porrazos. Los que son caídas, y los que son fasos.
Y retazos de la vida compartida, recordaría
Y es eso lo que pasa
Pasa eso y es lo qué
Que lo es, y pasa eso
Y... pasa eso ¡Que lo es!
Pero... pará un cacho. Esto ya se fué al carajo... ¿Qué pasa?
Pasa, pasa, pasa.
Pasa el tiempo y pasa el tren. Pasatiempo. Pasa de uva. Ciruela pasa.
Pasajera en trance, en tránsito perpetuo.
Pasajera del mundo en este tiempo.
Momento.
Instante.
Me revolcaría nuevamente en los cardos si es necesario.
Remaría en el barro
Saldría a la lluvia con catarro
Me iría lejos para extrañarte
Y volvería corriendo con flores de todos colores
Y canciones
Y sonrisas
Atesoraría cada segundo que pasamos
¡Puta, che!
Tan jodido es decir
Te amo
¡Feliz cumple mi amol!

miércoles, 10 de marzo de 2010

No recuerdo lo que acabo de decir


Escribirse, redactarse,
mamarracharse, doblarse
Convertirse en origami,
en comida de ratas.
Ser papel picado,
tirita, papelitao, rayado.
Blanco de colores
y cuadriculado.
Y evitar ser cenisa.
Y evitar las polillas.
Y ser de cancha.
Y no ser transa.
Y... y... y...
Mutar a mantel,
pañuelo, servilleta de papel.
celofán o glasé
Bolsa ecológica,
guía telefónica,
diario de noticias.
Como cinta, como moño,
como flor, como adorno,
de un cuaderno ser el forro.
Y ser un porro...

¿El huevo o la gallina?

(A pura cumbiamba)


Lo dice la vecina
fregando en lavandina
La señora paqueta
cenando en Recoleta
Y los pibes en la esquina...

¿Qué estuvo primero, el huevo o la gallina?

Todo el mundo se cuestiona
o al menos reflexiona
si fueron las hormonas,
feromonas o acetonas

Y no atinan, nunca atinan

¿Qué estuvo primero, el huevo o la gallina?

Si nació de una semilla
o de su madre fué astilla
O hubo una eva de gallinas
con un pollo coma Adán;
Y el muy vivo le dio pan
¡pan, pan, pan!
Nació entonces el huevo,
y todo va de nuevo

¿Qué estuvo primero, la gallina o el huevo?